El recorrido inició en la terraza de la Plaza Mexicana, que es la zona de estacionamiento que cuenta con tres niveles y en donde se llevaron a cabo actividades como adiestramiento canófilo y un evento musical, por parte de las bandas de guerra y grupos vocales del Ejército. Una rampa fue la salida de arranque para comenzar el recorrido, que contaba con centros de hidratación a lo largo de todo el paseo.
Elementos del Ejército y la Guardia Nacional indicaban la ruta a seguir, incluso para quienes decidieron llegar al AIFA en bicicleta se facilitó el transporte desde la entrada en camiones militares para recorrer la distancia de cinco kilómetros hasta el lugar donde comenzaría el evento.
El trayecto por las instalaciones lleva más tiempo del esperado, pues hay que tomarse la foto del recuerdo en algunos de los espacios, que también incluyen el Tren Olivo y el Tren Histórico Cultural.
También pudieron apreciarse el muro monumental de bienvenida, el área de documentación, prepuentes de abordaje, filtros de seguridad y locales comerciales, así como un hotel.
“Fue largo el trayecto, pero se disfrutó lo más que se pudo”, dijo Gabriel, ciclista de la Ciudad de México, quien hizo cuatro horas y 40 minutos de ida y regreso, para asistir a la rodada en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) en uno de los camiones de la Red de Transportes de Pasajeros (RTP) que puso a disposición el gobierno capitalino.
“Nos venimos preparados. Desde las 8:30 estuvimos formados para abordar, llevamos agua y un par de sándwiches, y muchas ganas de conocer esta obra. No soy tan progobierno, pero creo que es una forma única y tal vez irrepetible de conocer o rodar por las pistas de aterrizaje de un aeropuerto. Fue mucho tiempo, sí. Lo volvería a hacer, tal vez”.
Al igual que Gabriel, Martha, de 55 años, y su esposo, de la alcaldía Coyoacán, acudieron desde el Hemiciclo a Juárez para conocer la terminal que se inaugurará el 21 de marzo. Comentaron que se enteraron por medio de redes sociales sobre que camiones RTP ayudaría a todo aquel que quisiera visitar la obra.
“Decidimos pasar este domingo así. El trayecto es bastante, creo que vamos a mitad de camino, pero también es porque hay muchas obras que aún están en proceso”, aseveró, mientras su esposo se cubría el rostro de los intensos rayos del sol, cuando el transporte se encontraba detenido por el transito en la carretera México-Pachuca.
A las 9:00 horas de ayer, cuatro camiones de RTP salieron de la Ciudad rumbo al AIFA, pero el tránsito vehicular y obras hicieron que el trayecto fuera de dos hora y 20 minutos para arribar a la Base Aérea Militar de Santa Lucía, ubicada en Zumpango de Ocampo, Estado de México.
El tránsito vehicular en la carretera México-Pachuca se hizo presente, por lo que hubo algunos tramos donde el personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de policía del Estado de México dieron preferencia a los camiones de RTP para ingresar a la rodada ciclista.
Y es que en la zona del municipio de Tecámac se encuentra colapsada por las obras de ampliación del Mexibús, así como por los camiones de transporte público que van a vuelta de rueda, y los camiones de carga que obstruyen carriles.
La misma situación fue para el regreso, ya que a las 13:30 horas salió el RTP de Santa Lucía, y arribó a la capital del país cerca de las 15:40 horas, pero ya sin la ayuda de las autoridades de seguridad para abrir paso por las calles.
“Es bastante tiempo, pero por las obras de ampliación de las pistas y de transporte, pero espero que próximamente sea menos”, comentó Javier, un ciclista de la capital que iba en los camiones de RTP.
Los capitalinos que asistieron tuvieron cerca de hora y media, tiempo que les bastó para recorrer la pista de aterrizaje de aviones, que mide 3 mil 500 metros, por lo que algunos se quedaron con las ganas de visitar los museos del Mamut y el de Aviación.
Por otro lado, ciclistas y personas en redes denunciaron que el Instituto del Deporte tuvo mala organización, ya que no pudieron abordar los camiones, pues todos se ocuparon en menos de dos horas.
